El don de la culpa

Muchas veces sentimos culpa por muchas razones inexistentes, o la llevamos cargando por siempre. La culpa es un regalo de Dios que nos hace dolernos del mal cometido para poder reparar los daños, y ahí se debe enfocar el sentido que le demos. Debemos aprender si la culpa que sentimos es adaptativa o no.