No nos gusta admitir nuestra debilidad, así como a veces nos encanta que nos compadezcan. El equilibrio está en la obediencia a la realidad, admitiendo nuestras limitaciones y sosteniéndonos en la comunidad.
Psicología católica
No nos gusta admitir nuestra debilidad, así como a veces nos encanta que nos compadezcan. El equilibrio está en la obediencia a la realidad, admitiendo nuestras limitaciones y sosteniéndonos en la comunidad.